Los responsables de la gestión contable de una empresa están afrontando una época de grandes cambios y de una evidente transformación profesional. Hasta hace poco, los CFO siempre habían sido uno de los baluartes dentro de cualquier pyme, como eje vertebrador de la salud financiera de una entidad y que, entre otros hitos, servía para asegurar el capital circular suficiente para mantener el flujo de actividades. Sin embargo, la aceleración en el uso de la digitalización ha incrementado aún más el valor que aportan estos especialistas mientras, en paralelo, les está permitiendo liberar parte de sus agendas gracias a la automatización. Tiempo de calidad que les posibilita trabajar más activamente en mejorar el negocio de la empresa, algo capital en una coyuntura económica marcada a nivel global por la incertidumbre.

De este modo, los CFO son hoy un eje clave en la comunicación con algunos de los principales stakeholders de una compañía. Gracias a disponer de más información cualitativa, les es posible elaborar informes de previsión más precisos, detallados y sin margen de error, que sirven para orientar, aconsejar y ayudar a una mejor toma de decisiones a proveedores, aliados y, por supuesto, a sus propios compañeros de trabajo, brindándoles un servicio verdaderamente diferencial de gran valor añadido.

En paralelo, estos profesionales están pudiendo invertir más tiempo en otros retos clave para cualquier pyme en la actualidad, como el de ser más sostenible y llevar a cabo mayores iniciativas sobre responsabilidad social. Una buena gestión de los parámetros ESG (cuestiones medioambientales, sociales y de gobernanza) incrementa en el largo plazo la valoración financiera de una entidad así como la confianza de los inversores. Llevar a cabo métricas objetivas sobre este compromiso de la organización y comunicarlas directamente a los stakeholders de interés serán competencias cada vez más importantes para los responsables financieros.

Pero, ¿cómo es posible que los CFO saquen tiempo de sus complejas jornadas de trabajo para abordar estos y otros desafíos? La solución es tan sencilla como eficaz: a través de la tecnología, que les permite automatizar tareas administrativas en la gestión contable que antes les suponían horas de esfuerzo y dedicación. Es decir, que están afrontando con éxito el resto de actualizar por completo los parámetros de su trabajo, adaptándose a la revolución tecnológica mediante el uso de apps como la de Fuell, que permiten un mejor desempeño sobre la realidad contable de una entidad, reafirmando la solvencia financiera y el equilibrio de las cuentas.

La contabilidad digital, clave del éxito

Las empresas más productivas son aquellas que están afrontando proactivamente una estrategia de automatización robótica de procesos (RPA), digitalizando muchas actividades que, en la actualidad, la tecnología puede completar de manera más rápida, más eficiente y con un menor margen de error. Además, se elimina la necesidad de utilizar papel y otros soportes físicos, con las ventajas que eso aporta, por ejemplo, en cuestiones como más espacio en la oficina, la reducción de la probabilidad de alguna pérdida o sustracción de documentos importantes o la mejora en la comunicación de las personas involucradas en las distintas tareas de gestión de una pyme.

Centrándose en la contabilidad, la apuesta por la automatización es clave para utilizar y analizar la gran cantidad de datos que se maneja, convirtiéndolos en información de valor diferencial a través de informes, previsiones o comparativas entre ejercicios.  Además, se posibilita una mayor cantidad y calidad de informes de análisis predictivo, ya que apps como Fuell favorecen la elaboración de proyecciones a corto, medio y largo plazo gracias al manejo de las bases de datos que se recopilan y almacenan en la Nube. Y, todo ello, eliminando la necesidad de la carga manual de procesamiento de datos, tarea que siempre generaba un sinfín de incidencias cuando era realizada por manos humanas.

Una gestión digital de la contabilidad supone en la actualidad una oportunidad de crecimiento para cualquier pyme, ya que se es capaz de generar un valor diferencial y una ventaja competitiva gracias al uso y al aprovechamiento de los datos contables que, de manera continua y constante, genera cualquier entidad.

Una propuesta diferencial

Entre los conceptos clave en la automatización de los gastos está el de la flexibilidad. La aprobación de un gasto ya no consiste en una labor burocrática en la que se pierden recursos y se generan interminables tiempos de espera. Gracias a apps como Fuell, se apuesta por la agilidad en los procedimientos internos, de manera que, simplemente, a través de la gestión contable se puede mejorar la productividad y, con ello, ser más eficiente que el resto de competidores en un mercado.

Además, gracias a poder ejercer digitalmente un control total de la contabilidad, se pueden ir readaptando de manera constante e inmediata las necesidades financieras de la pyme, por ejemplo, aumentando el capital circulante si es necesario a corto plazo, de modo que el flujo de dinero nunca sea un motivo para condicionar la actividad de negocio de una compañía. En paralelo, el control digital de ingresos y gastos posibilita la eliminación de algunas partidas que pueden ser repetitivas o prescindibles y que se continuaban haciendo, muchas veces porque, al ser de escasa cuantía, pasaban desapercibidas, como puede ser el caso de las suscripciones.

En el caso participar de Fuell, cabe destacar que esta solución digital no precisa la adquisición de equipos de hardware ni de la compra de licencias de programas informáticos, como tampoco de actualizaciones periódicas. A través de una app se gestiona y almacena cualquier información contable en la Nube, a la que puede acceder todo dispositivo conectado que haya sido habilitado. Periódicamente, la app añade de manera automática nuevas actualizaciones y servicios que, de modo instantáneo, pueden disfrutar los clientes sin costes añadidos. Y, además, ofrece los estándares más elevados en cuanto a seguridad, protegiendo cualquier contenido sensible.

También es preciso destacar que este tipo de soluciones digitales para la automatización de la contabilidad, como es el caso de Fuell, cuentan con el respaldo legal que ofrece la homologación de la Agencia Tributaria, lo que, entre otras cosas, significa que están plenamente alineadas con la normativa actual.

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