Hay una realidad inamovible como que los días suceden a las noches y la primavera al invierno y es que, después de incurrir en un gasto corporativo, la mayoría de los trabajadores deben realizar un informe de gastos. Estos informes, destinados al departamento financiero, suelen incluir datos como la fecha del gasto, el dinero que se ha gastado y una justificación del mismo.
Es habitual que este informe de gastos lo tenga que realizar el mismo trabajador como parte de sus tareas habituales pero, ¿nos hemos parado a pensar en todo el tiempo que conlleva realizarlos? Primero hay que pedir permiso para realizarlo (a menos que se tenga de antemano), recordar guardar el ticket o la factura, pedir que te elaboren una factura ad hoc con los datos de tu empresa, rellenar el informe y luego hacérselo llegar al departamento financiero para que, por último, devuelva el dinero a la persona que lo haya puesto por adelantado.
Otro factor difícil de abordar en los informes son todos esos gastos imprevistos, inadecuados o fraudulentos que no se pueden detectar con facilidad a la hora de incurrir en ellos. Las tarjetas corporativas Fuell permiten conocer en todo momento dónde está yendo el dinero.
Informes de gastos automáticos
Una de las ventajas de las tarjetas de Fuell es que estos reportes se generan automáticamente al hacer el gasto, ya que la tarjeta corporativa está conectada con nuestro software. Por lo tanto, el trabajador solo tendría que recordar hacer una fotografía al ticket o a la factura y olvidarse de ello. Gracias a nuestra app, que permite ver los gastos en tiempo real, Fuell ayuda a los trabajadores a ahorrar tiempo en la elaboración de informes y a las empresas a ahorrar dinero, gracias a que tienen en todo momento el “mapa” de a qué se está destinando cada euro.
Automatizar los informes de gastos, según estimaciones de la propia industria, puede llegar a ahorrar a los trabajadores una media hora al mes, que se puede dedicar a tareas más productivas y que sí están relacionadas con sus tareas laborales. La sencillez de terminar un proceso tedioso con una simple fotografía con su móvil es la verdadera revolución de Fuell.